"No puede ser mejor lo que nos pasa" - P.e.l.s presenta 'Destellos del futuro'


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Este 2018 habrá de ser inolvidable para P.e.l.s, una banda que trabaja en silencio y que en sus más de 15 años juntos editaron tres discos, un simple y un EP. El último día de 2017 dieron a conocer Funkhaus, un EP que grabaron en Alemania en 2016 cuando fueron a mezclar las canciones del flamante Destellos del futuro. No sabían que allí mismo cambiarían los planes y en vez de mezclar el disco que ya tenían grabado, se dedicarían a registrar en vivo cuatro canciones nuevas rescatadas del arcón de los recuerdos. Todo en una semana.

"Funkhaus fue un cambio de planes, una confusión en el medio de la mezcla de Destellos del futuro. Resulta que habíamos planeado ir a mezclarlo a Alemania al estudio de Juanfe Rehm, un ingeniero argentino que tiene su estudio montado en las afueras de Berlín", explica el compositor, cantante y guitarrista Tingo Zucal. "Tanto nos impresionó el lugar que empezamos a replantearnos si valía la pena estar toda la semana mezclando y mirando un monitor. Juanfe nos propuso grabar algo y que después veamos dónde mezclar el disco que íbamos a mezclar [risas]. Empezamos a buscar canciones, algunas viejas y otras no, un poquito de pre-producción, y nos quedamos toda esa semana viviendo en el estudio", redondea.

Finalmente Destellos del futuro fue mezclado y masterizado acá. Como todo nuevo disco es un "cambio de piel", tal cuál canta Tingo en Camaleón. "Cada disco es un nuevo nacer - dice Marcos Fernandez Mouján. Cada uno aportó lo más sutil de lo que sabe hacer con un instrumento. Quedó un material muy directo, más directo que Gospels". Es cierto. Se pueden escuchar las diferencias con el celebrado, delicado y trabajadísimo Gospels: "Ese disco era más una idea de buscarle la vuelta para hacerlo más laberíntico y esquivar cada vez más lo ovio o lo que tiene que ver con el alma de la canción. Acá fue lo contrario, trabajamos para que esta idea nada la tape", refuerza Tingo.

Canciones como Luna negra, Cortina para un programa de televisión (con la voz luminosa de Litto Nebbia), Camaleón, Testigos dormidos o Junta mis piezas rozan la perfección. El don que tiene Tingo para a composición lleva a que no haya desencuentro entre melodía y letra. Nunca una palabra de más, cada acentuación rítmica cae en el momento justo y nada entra con forceps.

Para conversar sobre Destellos del futuro se acercaron Tingo e Ingnacio Zucal y Marcos Fernandez Mouján. Lo escuchan abajo y lo descargan ACÁ.

Recorrido: Funkhaus / el agite berlinés y el refinamiento de los derechos / la utilización de la palabra 'desaparecer' / el camino artístico y musical / el éxito / el autodidactismo y el vivo de la banda / la composición y la sintonía / la perfección de Tingo como compositor / la invitación a Litto Nebbia.

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EP y LP. "Funkhaus fue un cambio de planes, una confusión en el medio de la mezcla de Destellos del futuro. Resulta que habíamos planeado ir a mezclarlo a Alemania al estudio de Juanfe Rehm, un ingeniero argentino que tiene su estudio montado en las afueras de Berlín. Cuando llegamos a Berlín habíamos alquilado un hospedaje que era lamentable realmente, imposible de habitar, y ese mismo día Juanfe nos dijo: 'Vénganse al estudio, charlamos y quizás se pueden quedar a dormir acá'. Nosotros dijimos: 'Dormir en un estudio debe ser precario pero cualquier cosa es mejor que quedarse en este hospedaje'. Ese día llovía, nos tomamos un tranvía y fuimos a estos estudio que estaban en una zona industrial. Parecía un lugar abandonado, construcciones muy grandes de los años 30,40, 50 de Alemania Oriental. Llegamos a un pasillo de 100 metros de largo y en cada puertita había un estudio de grabación, todos iguales. Ese era solo un sector. El lugar era inmenso, habían estudios para orquestas. Tenía una costa de río, un delirio. Y cuando llegamos al estudio donde íbamos a mezclar el disco era increíble, todo acustizado de manera artesanal de los años 30 o 40, paneles acústicos tejidos de mimbre, mucha evanistería, madera. Resulta que el lugar tenía control room; un living con barra, heladera y sofá cama; y el estudio era enorme y se podía tirar colchones. Entonces dijimos: 'Nos quedamos acá'. Tanto nos impresionó el lugar que empezamos a replantearnos si valía la pena estar toda la semana mezclando y mirando un monitor. Juanfe nos propuso grabar algo y que después veamos dónde mezclar el disco que íbamos a mezclar [risas]. Empezamos a buscar canciones, algunas viejas y otras no, un poquito de pre-producción, y nos quedamos toda esa semana viviendo en el estudio", contó Tingo.

Temporalidad. "En el disco hay una llamada a la temporalidad y a la cosa cíclica de los amanecer y atardeceres, y el nuevo día, y la luna que aveces está y a veces no". 

Éxito I. "[Hubo un momento en que ] nos dimos cuenta de que el éxito o no éxito no iba a determinar para nada la continuidad de la banda, ni de [si íbamos a] seguir con inspiración o no. A eso se fue sumando que cada vez íbamos teniendo en la mochila más obra de la que nos sentimos dignos. A mí personalmente me cayó la ficha de que no puede ser mejor lo que nos pasa. Somo un grupo que nos llevamos muy bien, compartimos mucho más que música. Si esto no es el éxito qué otra cosa puede ser" (Tingo)

"Me han dicho que quedan bien los pifies en vivo" [risas] (Tingo)

Éxito II. "Hace unos años nos jactábamos del no éxito y era un argumento para capitalizar éxito [risas]" (Nacho Zucal)

Recorrido: Funkhaus / el agite berlinés y el refinamiento de los derechos / la utilización de la palabra 'desaparecer' / el camino artístico y musical / el éxito / el autodidactismo y el vivo de la banda / la composición y la sintonía /la perfección de Tigno como compositor / la invitación a Litto Nebbia /

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