"La música tiene un poder sanador y un poder destructor" - Minco presenta nuevo disco


*****

Programa N° 615 completo para escuchar. Arrancamos con música de Corneluis, que no es otro que Keigo Oyamada, músico japonés que acaba de editar el extraordinario Mellow waves. Entre relatos de bolseras que trabajaron en las fábricas de bolsas del puerto de Ingeniero White, fragmentos de una entrevista a Clarice Lispector y una charla con Jorge Fandermole (de la que ya escribiremos), llegamos a Minco. Ese es el nombre del proyecto que comanda el compositor Julián Minckas en guitarra y voz e integran también Julián Malosetti en batería; Juan Emilio Telechea en bajo, contrabajo y cello; Andres Elijovich en sintetizadores y Demián Velazco también en sintetizadores y looperas.

Julián Minckas es quien nos visitó. Es fan de Cornelius y tiempo atrás tuvo una banda llamada Puerto Infinito. Cerrada esa etapa arremete con una colección de ocho canciones que empezó a componer en 2015 y a grabar en 2016. Dos de ellas -nos dijo- funcionaron como gérmen del disco: Cantemos con alegría y Espejos: "Nacieron en un mismo momento de sanación y búsqueda interna, y hablan de ese trabajo que estaba teniendo en ese momento. Yo las siento como canciones primas. Esos dos fueron una especie de disparador del resto".

El oído de Julián es un oído atento que repara en la dificultad de escucharse en la ciudad cuando está llena de ruidos: "Es difícil escuchar a los demás y escucharse a uno mismo sobre todo. Yo tengo una idealización de la vida de campo y la quiero hacer en algún momento. El ruido, el caos, el stress... La idea final [del disco] es que te relaje y que te saque un poco la ansiedad. No estamos sintiendo el camino, siempre estamos en la mira de lo que va a pasar y no de lo que está pasando", resume.

Nos contó que desde chico hace canciones de forma natural. Lo hacía antes de saber tocar. "Ahora hago menos canciones que antes, pero presto más atención cuando las hago, le presto atención a la la letra, trato de cerrarla mejor". Parte de ese trabajo de cierre consiste en estar encima del sonido y trabajar obsesivamente para que cada disco suene cada vez mejor. "En este disco empezamos a juntarnos con Ezequiel Borra y a grabarlo de una forma despojada, sin click... Estábamos en el medio del proceso y reculé. Dije: 'Quiero que suene perfecto'. Metí Ctrl Z a esa forma de produccion y después Eze me ayudó con la siguiente. Es un productor genial y hace canciones increíbles. Yo le había propuesto ese encare y después me arrepentí porque me gusta que suene bien bien".

El recorrido: Estar atento al otro ("Es un trabajo y todo esto me lo canto a mí mismo. No soy Dalai Lama ni nada de eso") // el poder sanador de las canciones y su experiencia con Martín Reznik El Gnomo ("La música tiene un poder sanador y un poder destructor. No sólo la música sino que toda forma de comunicación humana puede confundir o esclarecer") // versión acústica de Dios // los 'comilunes' (club de cocina privada que llevan adelante con Hernán Jacinto y Ezequiel Kronenberg) // su fascinación por la música de Cornelius // Minco en Japón // la obsesión por el sonido. 

*****



*****

La presentación oficial del disco será en el CAFF el 12 de octubre.

Comentarios