Ir tras las huellas de Miguel Abuelo nunca fue fácil. Para los que somos admiradores de su obra encontrarnos con cosas de su primera época como sus primeros simples, su disco en solitario o sus poemas siempre fue una empresa difícil. Recién de un tiempo a esta parte se hizo posible leer cosas suyas o escuchar esas canciones maravillosas grabadas en Francia bajo el título " Et Nada ". Un par de rastreadores de los de antes supieron leer con pericia esas marcas que Miguel dejó diseminadas por la ciudad y nos allanaron el camino a todos. El lunes a la noche, en el marco del BAFICI, se proyectó en el MALBA “ Buen día, día ”, la película documental dirigida por Santiago Constantino y Eduardo Pinto que intenta rastrear los movimientos de Miguel a lo largo de su vida intensa. Lo que lograron es radiografiar para toda una nueva generación la figura de un artista inmenso (poeta y músico saludablemente distinto). Dice Andrés Calamaro en una de sus apariciones: “ No era un diamante en ...